La situation au Venezuela

La situacion en Venezuela

La crisis en Venezuela no deja de agravarse. Desde la muerte de Hugo Chávez en 2013, una crisis política se ha sumado a una situación económica catastrófica con una caída del precio del petróleo, principal recurso de este país, y una hiperinflación que provoca una grave escasez de alimentos y medicamentos, así como el éxodo de más de 4 millones de venezolanos.

En mayo de 2018, Nicolás Maduro es reelegido en una elección presidencial que los principales partidos de la oposición boicotearon, denunciando de antemano fraudes. La oposición, los Estados Unidos y los países del grupo Lima no reconocen los resultados.

Desde el 23 de enero, Venezuela vive con dos Presidentes: uno elegido, Nicolás Maduro, y el otro autoproclamado interino, Juan Guaidó. El 4 de febrero de 2019, Francia, Alemania, el Reino Unido, España, Portugal y los Países Bajos reconocieron a Juan Guaido como Presidente interino de Venezuela. Sin embargo, a nivel internacional, Maduro puede contar con el apoyo de una decena de países, entre ellos Uruguay, México, Turquía, China y Rusia.

Venezuela es una república donde el presidente tiene el poder ejecutivo. Si bien la oposición ha controlado el parlamento desde las últimas elecciones legislativas (6 de diciembre de 2015), casi no tiene poder desde la creación de la Asamblea Constituyente venezolana en julio de 2017.

El 2 de febrero, varios miles de manifestantes salieron a las calles de Caracas: algunos expresaron su apoyo a Juan Guaido y otros celebraban los 20 años de la revolución bolivariana de la que Maduro es heredero. Los venezolanos se oponen cada vez más al presidente Maduro.

En efecto, esta crisis política se deriva directamente de la situación económica. El país no ha resistido la caída de los precios del petróleo y esta situación tiene un gran impacto en la población, ya que la mayoría de los bienes de consumo que dependen de la importación. La moneda del país, el bolívar, se devaluó en relación con el dólar, lo que generó inflación. En 2016, los precios del consumo en Venezuela aumentaron un 800%. Para los venezolanos, las privaciones son frecuentes y la pobreza no deja de ganar terreno.

El 31 de marzo, el Gobierno de Venezuela anunció medidas drásticas para tratar de poner fin a los cortes de corrientes gigantescas que paralizan al país desde principios de marzo. Las autoridades han decretado un racionamiento de la electricidad durante 30 días, la suspensión de las clases en las escuelas y la reducción de la jornada de trabajo. Según Maduro, estos cortes son amenazas terroristas en el marco de una guerra eléctrica desencadenada para volver loco al país. La oposición y los expertos del sector consideran que estos repetidos cortes de energía se deben a la falta de inversiones en infraestructura.

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