El tema de Internet y de las redes sociales es uno de los más calientes y más discutidos de nuestra sociedad.

El tema de Internet y de las redes sociales es uno de los más calientes y más discutidos de nuestra sociedad.

Lo primero que hay que decir sobre el tema que nos ocupa es que, sin duda,  el desarrollo de Internet ha cambiado nuestra vita cotidiana mejorándola en cierto sentido: con un “click” podemos saber en tiempo real lo que pasa en el otro lado del mundo, quedando cómodamente sentados en nuestro sofá. Una grande revolución por lo que concierne a la información, que no es más subordinada a la televisión o al periódico.

Además gracias a las redes sociales las distancias se han acortado, ya que podemos  estar continuamente en contacto con nuestros amigos, a pesar de la distancia que nos separa.

Si por un lado Internet ha mejorado y simplificado nuestras vidas, por otro lado ha sacrificado nuestra intimidad. Como subraya Ricard Martinez con el desarrollo de las redes sociales se ha sustituido el concepto de “intimidad” por lo de “extimidad”, o sea la tendencia  a mostrar a los demás los aspectos más íntimos de nuestra vida. En realidad no se puede considerar Internet como el solo culpable de la falta de intimidad que nos interesa; en efecto todo tipo de información que ponemos en la red depende exclusivamente de nuestra voluntad. Por eso es importante (y con esto está de acuerdo Ricard Martinez) aprender a gestionar nuestra intimidad, eligiendo lo que los otros deben o no deben saber de nosotros.

Francesc Torralba afirma que la intimidad es un derecho y por eso hay que educar las nuevas generaciones a dividir la vida publica de la vida privada, la intimidad de la “extimidad”.

En conclusión podemos afirmar que

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