El camino de Santiago

EL CAMINO DE SANTIAGO

1. un lugar conmemorativo de gran importancia en el mundo cristiano

Cerca de un centenar de los miles de peregrinos que cada año recorren los caminos que conducen a Santiago de Compostela, se reunen anualmente en alguna ciudad del país, para compartir sus experiencias y la ilusión de obtener en el próximo año jubilar, el perdón de todos los pecados.

El Camino se viste de fiesta durante las celebraciones del Xacobeo o Año Santo Compostelano, el más antiguo de los años que conmemora la Iglesia Católica. La festividad tiene lugar siempre que el día de Santiago Apóstol, el 25 de Julio, cae en domingo, circunstancia que se produce cada seis, once, seis y cinco años respectivamente.

Estas rutas se describen por los nombres de las ciudades que atraviesan, y constituyen hoy el principal itinerario cultural de Europa.

Son muchos los motivos por los que los peregrinos salían de sus casas para dirigirse de punto de concentración en punto de concentración, a pie o a caballo, hacia la tumba del Apóstol. A menudo con el deseo de ganar gracias, algunos partían solos, otros viajaban como penitencia o con la esperanza de curarse físicamente, y algunos eran condenados a completar el viaje descalzos para obtener la remisión de su pena. Fue a partir del siglo XVI cuando empezaron a llegar las críticas. Con la llegada del humanismo filosófico y la Contrarreforma católica, los peregrinos compostelanos se enfrentaron a duras penas, denunciando la superstición, los abusos y la autenticidad de las reliquias del apóstol. La aparición de nuevas formas de devoción, como la devoción a la Virgen María a principios del siglo XIX, también ensombreció la peregrinación.

Poco a poco, el Camino de Santiago se va señalizando tanto en Francia como en España mediante clavos jacobeos, a veces acompañados de grandes placas. Esta señalización ayuda a los peregrinos en su viaje, que fueron casi 277.915 en 2016, frente a los 262.459 de 2015. Participan todas las nacionalidades, sea cual sea su motivación, religiosa, religiosa y cultural o puramente cultural.

1. un lugar de cultura

Gracias a las peregrinaciones, se ha constituido un patrimonio rico. Un patrimonio material como los lugares de culto, los hospitales, los albergues y los puentes, y un patrimonio inmaterial como los mitos, las leyendas y las canciones, están presentes a lo largo de las rutas del Camino de Santiago y pueden ser apreciados por los viajeros.

Ha sido una verdadera “autovía del conocimiento”: un ente difusor de los grandes movimientos culturales y artísticos que iban surgiendo por Europa: el románico, las catedrales góticas, la lírica medieval de las cantigas o la épica de las canciones de gesta. Ha sido fuente de inspiración para numerosos artistas, escritores y cineastas a lo largo de la historia. Muchas obras literarias, musicales y visuales han sido creadas en torno a la experiencia del Camino, contribuyendo así a su relevancia cultural.

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